Pioneros de la aviación: Juan de la Cierva

Juan de la Cierva fue un ingeniero y aviador español, conocido sobre todo por haber inventado el autogiro, precursor del helicóptero. Nació en Murcia (España) en 1895 y murió en Croydon (Inglaterra) en 1936. A lo largo de su carrera, ganó varios premios y galardones de asociaciones aeronáuticas nacionales y extranjeras

Cómo funciona el autogiro

El autogiro es un tipo de aeronave con alas unidas a un rotor. El rotor de la aeronave no está propulsado por un motor, sino que se hace girar por el viento, lo que crea una sustentación. La idea del autogiro se le ocurrió a Cierva mientras observaba la hélice de un avión de juguete que giraba. Se dio cuenta de que si podía encontrar una forma de mantener las palas del rotor de un avión girando, entonces crearía sustentación sin necesidad de un motor

El autogiro es una aeronave un tanto especial. Tiene un motor que hace girar una hélice en la parte trasera. Esta hélice ayuda al autogiro a moverse hacia adelante, creando una corriente de aire. También tiene otros rotores que giran libremente en el aire, lo que permite al autogiro subir y bajar como un helicóptero. Y también se mueve hacia adelante como un avión normal. Una de las cosas buenas de los autogiros es que pueden despegar y aterrizar en un espacio mucho más pequeño que un avión o un helicóptero.

La invención del autogiro

Cierva pasó los años siguientes trabajando en su invento y finalmente hizo debutar su primer autogiro, el Cierva C1, en Madrid en 1920. El C1 tenía una estructura metálica abierta con puntales en las alas y cables de refuerzo. El piloto se sentaba en un asiento expuesto con un joystick que controlaba la elevación y la dirección. Las palas del rotor eran de lona y madera y estaban impulsadas por un pequeño motor montado en la parte trasera de la nave

El C1 realizó su vuelo inaugural el 17 de enero de 1923. Alcanzó una altitud de 3 metros y voló durante 20 segundos antes de aterrizar sin problemas. A lo largo de 1923 y 1924, Cierva siguió probando y perfeccionando su diseño. Su mayor avance se produjo cuando añadió la «autoestabilización» al autogiro C1. Esto le permitió mantener el control incluso si una de las palas del rotor funcionaba mal o se rompía en vuelo

En 1925, Cierva formó la Autogiro Company of America con el financiero Hamilton Meigs Day. Juntos trabajaron para desarrollar y comercializar autogiros en Estados Unidos. En 1928, Cierva recibió el Trofeo Collier de manos del presidente Calvin Coolidge por sus contribuciones a la tecnología de la aviación

Los últimos años de De la Cierva

De la Cierva murió sólo ocho años después, el 9 de diciembre de 1936, cuando su avión se estrelló en la niebla al intentar aterrizar en el aeropuerto de Croydon, en Londres (Inglaterra). Tenía sólo 41 años en el momento de su muerte.

Desde entonces, los autogiros se han utilizado ampliamente en la aviación civil y militar. Durante la Segunda Guerra Mundial se utilizaron como aviones de entrenamiento y de observación. Los autogiros siguieron siendo populares hasta que los helicópteros se impusieron en la década de 1950

El autogiro es el predecesor de los drones actuales. Ambas aeronaves utilizan rotores para crear sustentación, y ambas están propulsadas por motores. La principal diferencia es que el autogiro tiene una hélice de empuje situada en la parte trasera, mientras que los drones de ala fija(no los multirrotores) suelen tener una hélice en la parte delantera. Esta diferencia permite al autogiro despegar y aterrizar en una distancia más corta que un dron.

Aunque no haya oído hablar de Juan de la Cierva, es el responsable de la invención de uno de los aviones más importantes de la historia: el autogiro. Este tipo de aeronave allanó el camino para los helicópteros y otras aeronaves de rotor que utilizamos hoy en día. La próxima vez que veas un dron volando por el cielo o un helicóptero despegando, recuerda a Juan de la Cierva y su increíble invento.